Manu Arregui .- Chelsea; amanecer
27/May/2017 - 22/Jul/2017
Esta exposición, el cuarto proyecto individual de MANU ARREGUI en la galería Espacio Mínimo, reúne las últimas producciones del artista: Ejercicios de medición sobre el movimiento amanerado (2014-17) que se muestra por primera vez en su versión instalativa, la presentación en primicia de la videoinstalación Chelsea; amanecer (2017) y la escultura Dating App (2017). Estos tres trabajos, concebidos de forma independiente, generan un diálogo en torno a las construcciones identitarias en una sociedad hipercapitalista en la que la misoginia y la homofobia siguen condicionando los modos de convivencia y representación.
Ejercicios de medición sobre el movimiento amanerado es una instalación construida a partir de dos vídeos y una serie de gráficos con los que se investigan los códigos y connotaciones vinculadas a la gestualidad, tomando como motivo los movimientos amanerados del cuerpo. Unos ademanes que, ejecutados por un varón, resultan censurables desde la hegemonía heteropatriarcal, pero también, en otros entornos presumiblemente concienciados como es el del colectivo gay. Como consecuencia, el artista convierte estos gestos “impropios” e “inútiles” en activadores del derecho a disentir, señalando la marginalización de algunos individuos frente a la sociedad por sus imperativos sexistas de masculinización.
Con ayuda de reglas gráficas, líneas de retícula y rastreadores de posición sobre diferentes articulaciones del cuerpo, ARREGUI parece querer constituir un sistema científico con el objetivo de esclarecer en qué consisten exactamente esos movimientos que, resultando socialmente reprobables, no cuentan con una adecuada descripción formal. El artista irónicamente captura y cataloga una tipología gestual con el fin de establecer una normativa ecuánime donde los ciudadanos puedan conocer la conducta corporal inadecuada a su sexo que reprueba su comunidad. La serie de gráficos subtitulada Nelly, Swish, Blasé y Camp presenta mediciones en forma de onda para ilustrar los cuatro tipos de movimiento según las categorías de afeminamiento establecidas por el psicoterapeuta C. A. Tripp en su precursor y controvertido libro The Homosexual Matrix (1975). En diversos análisis sobre la gestualidad se afirma que tradicionalmente lo masculino cohíbe el impulso. La actitud masculina es de compostura, mientras la mayor parte del movimiento y la emoción surgen fuera del sujeto. Un movimiento masculino es recto, enérgico y contiene desplazamientos grandes y cortados que se oponen a los ondulantes, suaves, vacilantes y pequeños. Los elementos de flexibilidad y animación no están en consonancia con la idea de la masculinidad heteronormativa. El principio que guía el mantenimiento de una imagen masculina es que un hombre debe permanecer fijo. Dentro de esa posición estructurante del orden de los géneros, los movimientos femeninos serían curvos y flexibles, implicando una predisposición escasa a la agresividad o resistencia y comunicando aproximabilidad, dulzura o sumisión, condiciones que garantizan la continuidad de la hegemonía del hombre dentro de las áreas dominantes de poder.
Otra de las piezas que conforman la exposición es Chelsea; amanecer, una instalación de dos canales de vídeo que presenta una ficción en torno al personaje real de Chelsea Manning, recientemente indultada de una sentencia a 35 años en una prisión militar en Kansas (EE.UU.), acusada de enviar documentos clasificados al sitio web Wikileaks. Un día después de conocerse su sentencia, la soldado antes conocida como Bradley Manning, anunció que deseaba someterse a una reasignación de sexo. A partir de este arranque histórico, MANU ARREGUI crea una escena donde la soldado se acerca a una playa desierta al amanecer, se desnuda, ejecuta un baile y se adentra en el agua hasta sumergirse. La banda de sonido desarrolla, con una voz en off atribuida al personaje, referencias filosóficas y políticas en una composición del artista que, además, cuenta con citas de diversos orígenes literarios como las de Clarice Lispector. Apoyado en la interpretación de la actriz que pone voz a la soldado, el artista trata ideas como la libertad, la guerra, la civilización o la existencia en un tono poético y trascendente. Mientras en una pantalla contemplamos la escena en un registro audiovisual convencional, en paralelo se desarrolla la narración a partir de recursos visuales infográficos: previsualización 3D, captura por sensor de profundidad, visualización de metadatos, mapeado de terreno, etc. remitiendo al lenguaje audiovisual empleado en las simulaciones jurídicas.
Chelsea Manning filtró miles de documentos que fueron muy valiosos para argumentar la inconstitucionalidad de las operaciones militares llevadas a cabo en Irak y Afganistán desvelando la verdad de lo que estaba pasando, que nada tenía que ver con la información que se estaba proporcionando a la ciudadanía. Profundamente conmocionada por lo que estaba presenciando como analista en Irak, decidió compartirlo a través de Wikileaks justo después de ver un vídeo en el que un helicóptero Apache de los Estados Unidos abría fuego contra un grupo de personas en Irak, los pilotos identificaron erróneamente a los civiles como insurgentes armados. Manning fue confinada y torturada tras su detención. Su encarcelamiento hubiera sido prácticamente de por vida. Una de las paradojas radica en que la soldado desobedeció su compromiso de confidencialidad pero, al mismo tiempo, el ejército no cumplió con la legalidad internacional. Su reasignación de sexo agravó esta situación de condena ya que la esfera pública patriarcal exige la capacidad de los individuos para maniobrar y vigilar los aspectos performativos de su propia conducta en público. Las acciones, palabras, gestos y movimientos corporales de los militares son la expresión estética de la ideología de los ejércitos. La determinación de la soldado Manning en su reasignación de sexo ofrece un nuevo punto de vista sobre el personaje y nos obliga a pensar en la importancia de la audacia y el sacrificio individual para promover la justicia social.
Por último, Dating App, es una escultura ejecutada a partir de tecnología de mecanizado e impresión 3D que muestra una versión tridimensional y de gran tamaño de un dispositivo que podría ser un Smartphone o una Tablet. Lo que sería la cuadrícula de una galería de fotos en una aplicación informática se convierte aquí en una construcción de celdas, algunas de ellas ocupadas por construcciones antropomorfas hibridadas con desechos de materiales tecnológicos, formas anatómicas seccionadas en sus tres dimensiones para encajar en las casillas asignadas. La volatilidad emocional característica de las relaciones personales en la sociedad Post-Internet contrasta con las propiedades de solidez y estatismo de la escultura, que parece querer existir como un residuo analógico de esta Era Digital para una expedición arqueológica en un futuro distópico. Esta pieza no sólo remite a los cambios en los consumos afectivos favorecidos por la aparición de estas aplicaciones, sino que problematiza los modos de adecuarse al “patrón” propiciado por la misma tecnología empleada en los ámbitos militares, la geolocalización, pero que sigue constreñida por la misma sociedad patriarcal que condiciona todas las obras de la muestra.
MANU ARREGUI (Santander, 1970), es Licenciado en Bellas Artes por la Universidad del País Vasco. Sus trabajos han sido incluidos en importantes exposiciones como Trans-sexual Express International comisariada por Xavier Araquistain y Rosa Martínez, Bad Boys proyecto de Agustín Pérez Rubio realizado con motivo de la 50 Bienal de Venecia, Monocanal Vídeo: 1996-2002 comisariada por Juan Antonio Álvarez-Reyes y Berta Sichel para el Museo Nacional Centro de Arte Reina Sofía, Sesiones Animadas proyecto de Juan Antonio Álvarez-Reyes para el mismo museo y el Centro Atlántico de Arte Moderno de Las Palmas, Chacun à son Goût comisariada por Rosa Martínez para la conmemoración del décimo aniversario del Museo Guggenheim de Bilbao, o España. Arte Español 1957-2007 en el Palazzo Sant’Elia de Palermo. Ha participado en importantes ferias internacionales de Arte Contemporáneo como ARCO (Madrid), ART BASEL MIAMI BEACH (Miami), o FRIEZE (Londres). En el año 2002 obtuvo la Beca de Artes Plásticas de la Fundación Marcelino Botín con la que completó su formación en el ISCP de New York. En 2004 gana el Primer Premio de Videocreación y Formatos Digitales Caixa Galicia y en 2007 el Premio Altadis de Artes Plásticas, y en 2014 el premio Arco Electrónico / Beep. Su obra está representada, entre otras, en las colecciones de los museos ARTIUM de Vitoria, Guggenheim de Bilbao, MUSAC de León y Reina Sofía de Madrid.